Excursiones en Copenhague

Cualquiera de los lugares de los que os he venido hablando en la guía de turismo de Copenhague es susceptible de hacerse con una visita guiada.

No obstante, siempre, primero suelo recomendar el conocer la ciudad a nuestro aire aprovechando la presencia de los clásicos sistemas Hop on / Hop off que usan los autobuses y barcos turísticos, con los que te puedes subir y bajar cuantas veces quieras en los puntos más turísticos de la ciudad.

Visitas guiadas por Copenhague

La ventaja de hacer una visita con un guía profesional es que el tiempo lo aprovecharéis mejor porque iréis sin rodeos a los sitios que, sí o sí, hay que visitar en la ciudad. Además, al mismo tiempo que los véis tendréis una explicación de su historia y de curiosidades que, de otro modo, de no ir con guía, tendríais que averiguar vosotros mismos.

Aún así, no solo hay la típica visita guiada por la ciudad: están también los tours alternativos, como los que se hacen por Christiania, o los que se hacen en bicicleta o en segway, las visitas guiadas a un monumento determinado, como el Palacio de Christianborg, o simplemente para conocer la historia de los jardines del Tivoli.

Excursiones desde Copenhague

Como siempre, uno puede salir a los alrededores de la ciudad que visita, pues en ellos también hay sitios interesantes. En el caso de Copenhague podemos hacer excursiones de medio día o de día entero. Entre las primeras  podemos visitar a 62 km Bakken. Llegamos a bordo del tren y su principal atractivo es el parque de atracciones.

Este parque es el mas antiguo de Europa y abre todos los días a partir de las 2pm así que podemos almorzar y después coger el tren para estar de regreso al anochecer. Hay muchos juegos mecánicos y las típicas montañas  rusas en un escenario natural de bosques y montañas que es muy bonito. No muy lejos de la ciudad está también Dragor, en la isla de Amager y a solo media hora de autobús del centro.

Se trata de un pueblo pesquero con calles adoquinadas estrechas, pequeñas y coloridas casas con jardines, algunos museos locales y restaurantes donde podemos almorzar en una atmósfera relajante. Si te gustan los castillos está el Tour de los Castillos que implica un paseo por el castillo Frederiksborg, el Fredensborg y el Kronborg. El primero incluye el Museo de Historia Nacional, el segundo es la residencia real de verano y el tercero es el escenario de Hamlet, de Shakespeare.

Este tour de castillos en general implica un regreso por la zona mas residencial de Copenhague, una ruta escénica por la costa de Dinamarca  que permite ver, con buen tiempo, la costa sueca. Hablando de mar hay paseos en botes, los cruceros rumbo a Hven, que comienzan a funcionar a comienzos de mayo y duran todo el verano.

Después de una hora y media de navegación se arriba a Bäckviken, la capital de Hven y después de 5 horas el bote emprende el viaje de regreso. Es el tiempo suficiente como para pasear por este bonito lugar en el que se puede visitar el Museo de Tycho Brahe, un astrónomo famoso en 1500, con su observatorio, pasear en tractor, en carruaje o alquilar una bici y salir a explorar.

Finalmente, siempre está la opción de cruzar a las ciudades suecas de Malmo y Lund. Tal vez, si lees a Henning Mankel, sientas curiosidad y quieras cruzar el puente de Oresund que une Suecia y Dinamarca. Lund fue la capital de Escania en el siglo XVI  y los martes, jueves y sábados se arma una feria en la plaza repleta de puestos y espectáculos.

Me quedan dos museos: el Museo de Arte Moderno Louisiana que está a 35 km de la ciudad, en la costa de Sealandia, y el Museo Arken de Arte Moderno en Koge Bugt Stranspark.

Información y reserva de excursiones

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